La Corporación Nacional Forestal, Conaf, es la institución encargada de velar por el cumplimiento de las  normas legales y técnicas vigentes en nuestro país referidas al uso, aprovechamiento, conservación y protección de los recursos forestales y del medio ambiente asociado, cuando en él se desarrollan actividades productivas o extractivas.

Alta responsabilidad si se considera que Chile es uno de los tres países latinoamericanos que ha aumentado la cobertura de sus bosques. El último Catastro de los Recursos Vegetacionales  revela que el bosque nativo creció de13.430.602 hectáreasen1997 a13.559.610 haen 2011, mientras el 75% se concentra entre las regiones de Los Lagos y Magallanes.

INTENSOS CONTROLES

Este año Conaf ha intensificado su tradicional programa de fiscalización forestal, en cuyo marco desarrolla una campaña nacional que incluye la difusión de las obligaciones establecidas en la legislación.

“Buscamos mejorar las medidas de protección de nuestros recursos vegetacionales, especialmente del bosque nativo. Queremos demostrar a los propietarios de bosques como a quienes realizan el transporte y comercio, que se puede realizar esta labor dentro de un marco legal, asegurando de esta forma el manejo sustentable de este recurso”, plantea Eduardo Vial, director ejecutivo de la entidad.

La normativa establece que los propietarios forestales, para intervenir sus bosques, deben disponer de un plan de manejo aprobado por Conaf. Asimismo, quienes transporten y acopien productos primarios del bosque nativo, especialmente leña, deben disponer de una guía de libre tránsito acreditada por Conaf, la que asegura el origen legal de los productos.

Los infractores que, por ejemplo, ejecuten una tala no autorizada, se exponen a multas que van desde  dos y hasta seis veces el valor comercial de los productos, su decomiso y la obligación de presentar un plan de manejo de corrección.

La campaña contempla operativos nacionales -ya se efectuó uno en abril– y regionales, seis de ellos ya realizados entre O’Higgins y Los Ríos. “Hace poco, en las cercanías de las Termas de Chillán, detectamos que había un plan de manejo para eucaliptos, pero se arrasó con bosque nativo. Cuantificamos lo talado y presentamos la denuncia ante el Juzgado de Policía Local”, manifestó Manuel Garrido, jefe provincial de Conaf en Ñuble.

Tomás Bennett, jefe del Departamento de Fiscalización Forestal, explicó que con relación a 2011 se duplicarán las inspecciones al transporte de productos primarios provenientes del bosque nativo, intensificándose los controles carreteros nocturnos y de fines de semana en los puntos donde existe un mayor movimiento de madera nativa, especialmente leña.

“También se aumentará en un 50% las fiscalizaciones a centros de acopio de madera nativa, las inspecciones prediales y los patrullajes aéreos”, subrayó.

Estas labores contribuyen igualmente a detectar el comercio ilegal y la evasión tributaria relativa al transporte y comercialización de productos primarios del bosque. En ellas, Conaf se coordina con otras instituciones, como el Servicio de Impuestos Internos, Carabineros de Chile y el Servicio Nacional

de Aduanas.

TECNOLOGÍA DE PUNTA

Este año las unidades de fiscalización disponen de más y mejores instrumentos, que facilitan la recolección de información rápida y precisa. Al uso de sensores remotos (imágenes satelitales y fotografías aéreas) se sumaron equipos de medición en terreno tales como GPS, distanciómetros e hipsómetros Vertex que miden con exactitud variables dendrométricas, como alturas y distancias en todo tipo de vegetación.

“La utilización de estos instrumentos implica ahorros significativos en tiempo, costos y gran efectividad. Incrementan la calidad de los antecedentes recopilados en terreno que sirven de sustento a las causas que eventualmente podrá presentar la Corporación ante los juzgados de Policía Local respectivos, en caso de detectarse infracciones a la legislación forestal”, enfatizó Eduardo Vial.

COLABORACIÓN CIUDADANA

Actualmente hay una creciente preocupación por el cuidado de los bosques y sus beneficios ambientales, como la captura y almacenamiento de CO2.

“Todas las denuncias responsables hechas por terceras personas constituyen una valiosa fuente de información que nos permite mejorar la protección de los bosques. Las denuncias de presuntas talas no autorizadas se pueden hacer a través de la página web de Conaf o en la oficina del servicio más cercana. Nosotros verificamos la información con visitas a terreno”, explica Bennett.

Durante 2011, Conaf recibió 993 denuncias de posibles infracciones a la legislación forestal y de ellas 40% resultaron positivas; hasta mayo del año en curso se han recepcionado