El objetivo es generar un estudio y análisis del patrimonio vitivinícola del país junto a un comité que estará conformado por el Ministerio de Agricultura a través de la Fundación de Comunicaciones, Capacitación y Cultura del Agro (FUCOA), además de académicos, productores e instituciones relativas a la industria del vino, para, con el apoyo de la Unesco, lograr la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte del organismo internacional.
Francisco Contardo, vicepresidente de FUCOA, destacó la importancia que tendrá la institución al ser parte de este comité de evaluación. “Creemos que el aporte desde FUCOA, como especialista en cultura rural, es clave en cuanto a la orientación que pueda tener este trabajo, para que efectivamente sea útil para la industria viñatera y para la gente que trabaja y que vive de esta actividad”.
La iniciativa, que surgió el 2011 en el marco del seminario “Vinos, Gastronomía y Ruralidad”, gestionado por la Biblioteca Nacional de Chile a través de su Biblioteca Conmemorativa José María Arguedas (BCJMA), este año contó con su segunda versión realizada entre el 16 y 18 de octubre, instancia que tuvo como objetivo central reflexionar sobre el “Patrimonio Vitivinícola: territorio, tradiciones y puesta en valor”.